Encuentro de Consejos Provinciales de España

No es posible avanzar en la vida sin soñar. Sabemos bien que para iniciar y continuar un camino es necesario soñarlo y prepararlo juntas.

Es largo el camino que las Hijas de la Caridad de las diferentes Provincias de España llevamos años caminando juntas, pero hoy, más que nunca, como un signo claro de nuestro tiempo, somos llamadas a seguir soñando y caminando para que la Compañía en España pueda seguir siendo realmente, en el presente y en el futuro, una respuesta clara y cercana para los pobres y para las jóvenes que con ilusión quieran seguir respondiendo al Señor al servicio de Cristo en los más vulnerables. Y ese presente, pero sobre todo, ese futuro, no es posible si no lo preparamos juntas. 

Preparar ese futuro juntas supone conocernos más, discernir, abrir caminos y espacios de reflexión, participación y trabajo en común. Este es el punto de inicio y lo que supuso la jornada de reflexión y trabajo del pasado 17 de diciembre de los cuatro Consejos Provinciales de España que tuvo lugar en Madrid y en la que nos acompañó el P. Corpus Delgado y sor Antonia González, Consejera General. 

Con el deseo de una fidelidad siempre renovada, en busca de la voluntad de Dios para la Compañía en España y con la disponibilidad necesaria para superar los miedos y las propias opiniones, soñamos con abrir un camino de discernimiento en el que las Hermanas de todas las Provincias puedan participar y en el que el verdadero protagonista sea el Espíritu Santo. Silencio para escuchar al Espíritu, oración y verdadera disponibilidad como único camino para seguir CAMINANDO JUNTAS. 

Dejarnos hacer por el Espíritu me recuerda las Palabras del Señor a Jeremías: 
“El Señor se dirigió a mí y me dijo: “Baja a la casa del alfarero y allí te comunicaré un mensaje”. Yo, Jeremías, bajé y encontré al alfarero trabajando el barro en el torno. Cuando la vasija que estaba haciendo le salía mal, volvía a hacer otra con el mismo barro, hasta que quedaba como él quería. Entonces el Señor me dijo: “¿Acaso no puedo hacer yo con vosotros los mismo que este alfarero hace con el barro? Vosotros sois en mis manos como el barro en las manos del alfarero”. (Jr, 18,1-6)

Dejemos que el Señor modele nuestro barro, nuestras Provincias, la Compañía en España. 

Tenemos muchos pasos por andar, pero queremos vivirlos con la ilusión de que con cada paso que demos algo nuevo puede surgir. 

Agradecemos a la Casa Sta. Luisa su acogida y la posibilidad de habernos encontrado, pues el encuentro en sí mismo es siempre una riqueza para cada una de nosotras. Al P. Corpus y a sor Antonia les agradecemos su forma de estar y acompañarnos. Y, sobre todo, agradecemos la posibilidad de haber podido discernir y trabajar juntas. 

Laura García HC

Consejera de Formación